La forma de calentar su casa es muy importante. Los mejores sistemas de calefacción no solo le mantendrá acogido en invierno, sino que también contribuirá a que sus facturas de energía sean lo más bajas posible.
La calefacción central de gas es la más común en distintos países de Europa, pero más de un millón de hogares no están conectados a la red de gas. Esto sucede más en las zonas rurales o en los bloques de pisos.
A continuación te explicamos los diferentes sistemas de calefacción disponibles para tu casa, incluidas algunas energías renovables:
Calefacción central de gas
Tabla de contenidos
Si tu casa está conectada a la red nacional de gas, un sistema de calefacción central de gas suele ser la opción más barata.
Puedes ahorrar dinero en gastos de funcionamiento a largo plazo si eliges una caldera fiable y eficiente cuando tu modelo actual se estropee.
Una forma rápida y sencilla de reducir la factura de la calefacción es utilizar los controles de la misma para minimizar la cantidad de energía que se usa.
Sistemas de calefacción por biomasa
Una alternativa al uso del gas, la electricidad, el gasóleo o el GLP para calentar su casa es instalar un sistema de calefacción por biomasa o madera. Estos sistemas queman material orgánico, como troncos o pellets de madera, para proporcionar calor y agua caliente.
También puede conectar la estufa a una caldera para calentar el agua caliente y el resto de la casa.
Sistemas de calefacción central eléctrica
Los acumuladores de calor nocturnos, junto con ciertas tarifas eléctricas, son la configuración más común para la calefacción central eléctrica. Los acumuladores de calor son habituales en los pisos, especialmente en los de nueva construcción.
Calefacción central de GLP
La calefacción central de gas licuado de petróleo (GLP) se utiliza para calentar algunas viviendas. Se suministra en camiones cisterna y suele almacenarse en un depósito en el jardín.
Sistemas de calefacción central de gasóleo
Para instalar este sistema de calefacción se necesitará un depósito fuera de su casa en el que se almacena el combustible para la calefacción central de gasóleo.
Calentadores de inmersión y acumuladores
Los calentadores de inmersión (a veces conocidos como calderas de megaflujo o sistemas de agua caliente sin ventilación) y los acumuladores de calor forman parte de los sistemas de calefacción eléctrica. Los primeros calientan el agua y los segundos el espacio interior de la vivienda.
Calor renovable
Otra opción para calentar su casa es generar su propia energía a partir de tecnología de microgeneración de baja o nula emisión de carbono.
Generar su propia calefacción, en lugar de utilizar el gas y la electricidad de la red, o cualquier otro combustible fósil, reduce su huella de carbono. También significa que se depende menos de fuentes de energía que están cada vez más sujetas a la demanda mundial y, por tanto, es probable que tengan precios altos y volátiles en el futuro.
Los sistemas de calefacción con energías renovables incluyen:
- Estufas de leña
- Sistemas solares de calentamiento de agua
- Bombas de calor
- Calderas de biomasa
Generar su propia electricidad
También puede generar su propia electricidad a partir de paneles solares o turbinas eólicas. Por lo general, los propietarios de viviendas instalan paneles solares fotovoltaicos para alimentar sus electrodomésticos, o incluso para cargar un vehículo eléctrico, más que para alimentar la calefacción central. Los paneles solares generan la mayor parte de la electricidad durante los periodos de sol, que es menos probable que coincidan con el momento en que se desea utilizar la calefacción.
Climnatur expertos en climatización.